Quizás es una de las preguntas más frecuentes que nos hacemos cuando somos madres y no entendemos cómo estando tan agustito dormidos y calentitos, tienen que despertarse por la noche y ponerse a llorar.
Pues bien, hoy en el blog de El peque de la Casa lo respondemos.
El primer motivo son los ciclos del suño, es decir, son disitntos y muchos más cortos que el de los adultos de ahí que sea normal que se despiernten entre ciclo y ciclo. Es entonces cuando puede tener hambre o sed, se ha producido un cambio de luz, está incómodo o con el pañal sucio…
Su itmo biológico no permite que puedan distinguir entre la noche y el día por lo que por eso muchos niños de hasta 5 años se van con tanta energía a la cama hasta que posterioremente se les estabiliza.
Su cerebro sólo está desarrollado en un 25% por lo que necesita de este tipo de cambios en su ritmo del sueño para poder ir adaptándose y cofer la confianza necesaria para que todas las nuevas experiencias le ayuden a seguir progresando en su desarrollo cerebral.
Ahora bien, existen en la actualidad algunos métodos que se basan en entrenar el sueño de un niño dejándoles llorar hasta que se canses por ejemplo. Sin embargo, aunque un bebé deje de llorar por aburrimiento, no significa que él esté tranquilo. Al final es un proceso instintivo con el que cuentan los bebés y hacer eso puede perjudicarles con la confianza que desarrolle hacia sus padres.
En último lugar, pero no por ello menos importante, los bebés necesitan atención, apoyo y ánimo porque la independencia todavía les queda lejos .